Solo cuatro de los nueve candidatos han militado siempre en la izquierda (sea PRD o Morena): Rocío Nahle, Javier May, Margarita González y Clara Brugada. El resto provienen del PRI, PAN y Verde y son reflejo de cómo Morena sacrifica su ideología a cambio de conseguir votos.
• Huacho Díaz (Yucatán): Militó en el PAN por 18 años. Fue candidato a gobernador en 2012 y quiso serlo en 18 y, al no lograrlo, renuncia al partido para irse a Morena.
• Alejandro Armenta (Puebla): Militó en el PRI por casi 30 años. Fue legislador en varias ocasiones. y secretario del gabinete de Mario Marín, el «gober precioso».
• *Claudia Delgadillo (Jalisco): Militó en el PRI 2000-2018 donde fue regidora y diputada federal.
• Alma Alcaraz (Guanajuato): Militó en el PAN 1996-2014.
• Eduardo Ramírez (Chiapas) militó en el PVEM desde 2008 hasta 2018 (los tiempos de su alianza con Peña Nieto y el PRI). Hace seis años quiso ser candidato de ambos partidos. Se volvió «moreno» cuando su jefe político, Manuel Velasco, apoyó a AMLO.
Parece que gran tarea tiene Morena es formar nuevos cuadros, porque sino será la historia de siempre ¡puro oportunismo político!