Desplazamientos y disputas internas en MORENA: Un reflejo de tensiones crecientes

Poder Ciudadano

Autor: Juan Carlos Flores Aquino

No sólo en la Ciudad de México hay descontento y protestas de la militancia de Morena contra sus dirigentes nacionales, llámese Mario Delgado Presidente, y la Senadora Citlalli Hernández, Secretaria General. Esto se debe a los reclamos por imposiciones o designaciones inexplicables, que dejan mucho que pensar.

Nos llega desde Torreón Coahuila, un ejemplo de conflicto interno muy notable. Christian López, militante del partido, ha presentado un juicio de protección de derechos políticos en respuesta a decisiones controvertidas tomadas por Shamir Fernández. Este último, excluyó a López de la lista de candidatos plurinominales para incluir a expriistas—Gabriel Francisco y Arturo Braña—y a la esposa de su amigo, Mario Lozoya.

La maniobra de Fernández no solo ha sembrado discordia interna, sino que también ha puesto en tela de juicio el compromiso de MORENA con la inclusividad y las acciones afirmativas, especialmente frente a la comunidad LGBTTTIQ+. Este acto ha desencadenado una crisis de representatividad y ha exacerbado las tensiones internas, mostrando una clara falta de consideración por los principios éticos y democráticos del partido.

El impacto de estas acciones es profundo. Fernández, al priorizar lealtades personales sobre el mérito y la equidad, ha comprometido la integridad del partido en Torreón, provocando una percepción de que MORENA es susceptible a las mismas prácticas nepotistas y clientelares que históricamente ha criticado.

Por otro lado, reclaman que la falta de liderazgo de Mario Delgado, ha quedado en evidencia. Su incapacidad para manejar esta crisis y otras similares, ha generado un vacío de autoridad que amenaza con desestabilizar la cohesión y la dirección del partido. Su reticencia a intervenir en conflictos internos está permitiendo que las fracturas dentro del partido se amplíen, lo que podría tener consecuencias duraderas para MORENA, en todo el estado de Coahuila.

Mientras tanto, sus bases luchan por mantener un equilibrio entre las expectativas y la realidad política del estado, dejando a grandes poblaciones sin la representación adecuada y limitándose a cumplir con los mínimos requisitos legales y éticos.

El Tribunal Electoral de Coahuila ha optado por devolver el asunto a MORENA sin resolver estas quejas, dejando en manos de la Comisión Nacional, la tarea de mediar y resolver esta disputa. Este conflicto entre los fundadores de la 4T y los neomorenistas expriistas, no solo pone de manifiesto las divisiones internas, sino que también cuestiona la capacidad del partido para mantener sus principios fundacionales de justicia e integridad.

El desenlace de este conflicto es crucial y podría definir el futuro político de MORENA. Sin dejar de lado, que ante la ausencia de Armando Guadiana en Coahuila, los grupos morenistas, no reconocen el liderazgo de sus hijos políticos. La capacidad de la Comisión Nacional para restaurar la unidad y reafirmar los principios del partido será determinante en los esfuerzos por recuperar la confianza y la coherencia interna.

Esto es sólo un ejemplo. Y así en muchos lugares de la República Mexicana, prevalecientes conflictos aún en la Ciudad de México.

 

X: @floresaquino

FB: Juan Carlos Flores (fan page)

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