Hasta que alguien le pone un alto al neomorenista Adrián Rubalcaba.
Fue la joven diputada del PRI, Tania Larios, quien denunció al “senador suplente” y lo hizo como debe ser, en la Fiscalía de la Ciudad de México, aunque como hemos visto que funciona esa Fiscalía, quién sabe qué carpetazo le den.
Aquí lo importante fue que alguien le pusiera un alto al que presume de ser el consentido de Clarita y de la mismísima Sheinbaum, y que aunque no agarró buen hueso sigue metiendo la mano para hacer lo que quiera en Morena.
Que lo exhibiera públicamente con la puritita verdad, la violencia que ejerce el exalcalde. Y también sus movidas al interior de Morena.
Es sabido por todos que él colocó a Brenda Ruiz (a quienes sus llevaditos compañeres de Morena ya le pusieron un par de apodos) como Vicecoordinadora, y como lo dijera el que llegó por rebote al Congreso, Paulo García, todos saben que llegó ahí por dos poderosas razones: el dinero y los chayos (Según dicen ellos, no nos vaya echar bronca Ruvalcaba jejeje)
Pero esa no fue la única vez que Adriancito mostró su punch. Fue también el que maniobró para que pusieran al Alcalde sustituto en la Cuauhtémoc, propuesto por Sandra Cuevas, y también quienes los acercó a la familia de ella con Clara Brugada y con el Partido Verde. Tanto, que un hermano de Sandra fue candidato pluri por el verde, aunque no llegó, sino capaz lo hacían vocero del grupo de Morena, ya saben que les encanta rescatar panistas y priistas haiga sido como haiga sido.
Por lo pronto, se nota que anda muy de malitas Adrián, y como anda sin hueso, pues le encanta estar dándole órdenes a su subordinada Vicecoordinadora. Lo extraño es que en Morena le den tanta importancia al verde político.
¡Hasta la próxima!
