ASÍ LAS COSAS
Por Adolfo Prieto
La renuncia al Partido Revolucionario Institucional por parte del alcalde de Cuajimalpa, Adrián Rubalcava, del ex gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, y del ex mandatario del Estado de México, Eruviel Ávila, no la puedo interpretar más que como una conducta de alta traición, no al partido político, sino a la ciudadanía que en algún momento votó por ellos por su afiliación priista, y que ahora, en un acto por demás comoditicio, quieren ocupar un puesto dentro del gabinete de Claudia Sheinbaum Pardo, en el incierto caso de que ella gane la Presidencia de la República.
Queda evidenciada la incongruencia y el descaro con el que estos tres, chincualudos y chimiscoleros políticos, saltan de un mecate a otro para que no se desvanezcan sus ambiciones políticas y puedan escalar hacia puestos superiores, como sería el caso de una secretaría de estado o, en 6 años, la candidatura presidencial.
La administración de Murat y de Ávila estuvo envuelta en una serie de anomalías y corruptelas cuya descripción detallada se puede resumir observando la situación actual en la que están el Estado de México y Oaxaca. Ambos políticos bien harían en apodarse los torpedos, porque todo lo que tocan, lo hunden.
Pero retomando al primero, pregonó a ultranza que en su gobierno se daría el «milagro oaxaqueño»; sin embargo, dicho milagro nunca llegó, por el contrario, resultó un rotundo fracaso cuya última estocada fue cederle la estafeta de gobernador a un militante de Morena, hecho que se replicó en varios estados de la república mexicana que eran gobernados por priistas y que por azares del destino dejaron su administración a morenistas, obteniendo como premio puestos importantes en la diplomacia mexicana. En Oaxaca, como en varios estados del país, se desató una crisis de desaparición de personas, superando los 3 mil casos, entre éstos, los de mil 984 mujeres, y con la mano en la cintura el muchacho Murat busca acomodo en el partido en el poder.
En el caso de Eruviel Ávila, a su administración se le señalaron infinidad de irregularidades en el ejercicio público, corrupción y desvíos, en donde más de mil millones de pesos fueron mal utilizados (con eso de que les encanta el dinero mal habido a estos politicuchos). En el libro La monarquía de la barbarie de Humberto Padgett León, se documentó que se usaron recursos federales en el Estado de México por la friolera suma de más de 8 mil 163 millones de pesos, lo cual no parece importarle a Eruviel pues quiere adherirse a Sheinbaum pensando, tal vez, que la ciudadanía no tiene memoria o simplemente hacerse el Tío Lolo al declarar que “tengo amigos personales en ese partido, finalmente todos vamos rumbo al mismo camino y a la misma meta, pero por carriles separados” y con total descaró se atrevió a hablar por otros al asegurar que “cientos de ex priistas y ex panistas, están convencidos del proyecto de la precandidata morenista: coincidimos con la plataforma e ideales de la doctora Sheinbaum”. Y para no perder su hipócrita costumbre de adular como sinónimo de arrastrarse, remató: “La opción para que le vaya muy bien a México es con la doctora Claudia Sheinbaum; ni busco cargo, ni busco hueso, ni busco puesto, lo que busco es un proyecto y vamos a impulsarlo con la doctora Sheinbaum”, comentó.
Y con respecto al joven Adrián Rubalcava no hay que olvidar que en el año 2020 dos funcionarios de la alcaldía Cuajimalpa, que él gobernaba, fueron interceptados por miembros de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, mientras los primeros viajaban en una camioneta y portaban un arma de fuego corta. A ambos servidores públicos se les señaló como los principales «operadores financieros y logísticos» de un sujeto apodado el «Lenin», líder del grupo «Los Malcriados 3AD», que tiene su base de operaciones en las alcaldías de Cuajimalpa y Álvaro Obregón. A Adriancito no le quedó otra que declarar que se trabaja en conjunto con el gobierno de la Ciudad de México «para atrapar a los corruptos» y enfatizó que se aplicarían nuevos exámenes de confianza.
Y todo lo anterior no tendría razón de ser si no encuentran quién les haga el coro, por ello Sheinbaum celebró la aberrante decisión de los tres y, para no perder la costumbre hipócrita que distingue al político, agradeció el apoyo de tan innombrables ex priistas, no sin antes advertirles que no tendrán ningún cargo en su movimiento.
Cada vez es más común que se realicé esa migración perversa cuyo único objetivo es hacerse de poder, conseguir fuero, seguir viviendo del erario o tejer una serie de complicidades para mantenerse vigente en el teje y maneje de cualquier gobierno, aunque se tenga un currículum vitae nefasto.
Hasta la próxima.
adolfoprietovec@hotmail.com